jueves, 20 de febrero de 2014

Las palabras con cuentagotas como los miedos.

Si no existieras, te inventaría, debajo de mis sábanas o pegado a mis muñecas. Si fuera valiente, si no me diera miedo perderte algún día me iría lejos, quizá a Madrid, pero estoy perdidamente, y no quiero encontrarme, enamorada de ti; de tus mensajes de buenos días que se vuelven mi profecía, de tus risas cálidas y de los abrazos que me dejan sin respiración, y cuantos querrían haber sido ahogados de amor.
Ahora el norte a perdido un poco de cordura y la ha ganado, como si no la tuviera, el sur. Ahora que deambulas por mis noches, que te cuelas en mis sueños y me esperas en vigilia querría recordarte que aquí, no tan lejos de ti y lo que somos tu y yo, se encuentran unos labios que están pidiendo, muy bajito, sólo para que tu lo oigas, ser besados.