Cuando tu ausencia llena cada rincón de mi habitación, cuando siento que una parte de mi se la ha llevado un conductor, cuando siento que querer es poder, cuando la única limitación a tu lado, es la mera satisfacción de saber, que no hay limitación posible, ni distancia posible para romper.
Cuando en una pequeña caja, caben miles de grandes momentos, cuando en un te quiero, ya no cabe cuánto siento; mas se que no todo son palabras, pues quedaría tan y tan pobre escribir solo que te quiero...
Cuando nos saltamos las directrices de una rutina encorsetada, en la que no caben pequeñas sorpresas, en la que cada minuto es como el anterior, fluyen al unísono, entonces, es cuando sin articular palabra alguna, te hago saber que ésto va a ser diferente, que el tiempo no desgastará, solo va a fortificar.
Cuando entrelazamos miradas, cuando siento que a parte de ti, ya, no quiero nada.
Cuando mis paredes quedan impregnadas por tu ausencia, cuando el miedo a sentirte lejos, acecha a quedarse más tiempo; es, entonces, cuando sientes que tal vacío te llena por completo, y no importa el resto.
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