Masoquismo.

Y ahora que ya creía que empezaba a olvidar tu risa, tu voz, tu tacto, tu sabor... Aparecen tus palabras y me hacen retroceder todo lo avanzado.
Tu recuerdo es casi mortífero. Me desgarra entera, sin miramientos. Me desgarra el corazón, me deja sin misiles que tirar. Me deja indefensa, pensativa, dándole vueltas a los "y si..."
Malditas tus palabras y el día en que las escribiste. Malditas tus canciones y a la persona a quien se las dirigiste. Maldito día en el que te conocí y sentí algo. Maldito día de hoy en que me vuelvo esclava del recuerdo, buscando cualquier ápice de nuestra historia para eliminarlo, para olvidarlo, para romperlo... 
Maldito el día que me acuerdo de ti, maldigo todos los días entonces. Maldigo a mi corazón por sentir esta opresión, a mi cabeza por ponerme obstáculos de por medio. Te maldigo a ti y a tu recuerdo, y es que ahora solo quiero olvidarte.