Cuatro treces no son nada!

Cada vez que hablo de sentimientos me cuesta encontrar las palabras con las que empezar. No se si es más adecuado empezar con un "hola mi vida, esto no es un texto más..." o con un "si, hoy es 13 de nuevo y no sabes cuanto me gusta esto".
Realmente nunca empiezo de ninguna de las dos formas anteriores, dejo que escriba el corazón con la ayuda de los dedos, recuerdo todo lo que he vivido contigo y tengo en mente el largo futuro que me espera a tu lado y me asusto ante esa gran idea.
A parte de besos, abrazos, caricias y palabras sinceras me has enseñado más, algo que pocos valoran, algo que yo no valoraba antes, me has enseñado a brillar. Ahora ya no brillo por ser la mejor en algo que todos hacen, ahora brillo por ser la que despunta, por ser la que le dice al mundo que se equivoca. Me has enseñado que no hay mayor satisfacción que ver la cara de la persona que quieres roja, con una de esas sonrisas que hipnotizan, con los ojos brillantes de amor... 
Contigo estoy derribando día a día esa pequeña pared de hielo que se cruza entre mi corazón y mis lágrimas, sí, contigo he llorado y he sentido como algo dentro de mi se fundía.  He volado muy alto a tu lado, te e sentido como nunca he sentido a nadie, he sido y espero seguir siendo la niña de tu piel y me he enredado contigo hasta perderme.
Sabes? Veo como el mundo avanza, como todos corren por llegar a un fin, y me giro y te veo a ti y a mi, sin ninguna prisa, sin ningún temor, preparados para superar cualquier cosa, demostrando confianza, hablando con sonrisas y jugando a ponerle nombre a nuestro pequeño cactus. 

Te quiero, te quiero muchísimo, y te prometo que nunca mi corazón había sufrido tanto al no tener a alguien al lado. Me gusta necesitarte, depender de ti, me gustan tus consejos y que seas mi vía de escape. 
Simplemente me gusta quererte!


Post scriptum: Las connotaciones negativas que se le dan al martes 13 no tienen fundamentos científicos, por lo cual se debe tener muy claro que sólo se trata de un mito. Incluso hay mucha gente que lo ha tomado al revés, por lo cual dentro de sus creencias, lo consideran como un día de buena suerte.