CB - S2

No se que parte del verbo querer, que no es lo mismo que creer, nos olvidamos. Aun que yo creo que te querré hasta que mis huesos sean polvo. Polvo que soples con tus labios repletos de pliegues, que dan para hacerse un abrigo en los tiempos más fríos donde tu ausencia es la mitad que tu un día decidiste ocupar.

Ácido para la piel.

La misma palabra que ya había olvidado salió de otros labios que no eran los tuyos, y yo, tras escucharlo, me quedé totalmente quieta, sin nada que decir, sin poder sacar fuerzas para contestar. Que raro sonaba. De echo, no es que sonará raro, si no, diferente. Algo así como un cambio de sentido, como si el amarillo se tornara rojo o tus labios se volvieran melodía, perdón, melodía ya lo son. 

No podía sacarme la manera en que tu me tarareabas esa palabra por toda mi cintura, tampoco podía dejar de pensar en lo natural que había sonado al salir del baile de su lengua. Comparaciones. A cada instante se asomaban por las esquinas que tiene mi calle, que es toda recta, pero con demasiadas desviaciones. Hacía tus ojos, hacía los infinitos mares de segundos que hoy nos separan. 

Pero había sido nuestra palabra, nuestra palabra que sin querer significaba demasiado, mucho, pero amor, cariño. Ya sabes de lo que te hablo. Quizás nunca había sido nuestra y decidimos robársela al destino, quizás la atesoramos demasiad entre nuestros dedos. Quizás la guardamos al fondo de esa botella de recuerdos que hoy se encuentra rota entre mis pies.

Da igual, fuera de quien fuera esa palabra, nosotros la hicimos grande a nuestro lado, tanto, que llego a comernos y por eso hoy estamos engullidos por  los vocablos que nos narrábamos cada noche antes de revolver la almohada, de deshacer los miedos con ácido sulfúrico, antes de hacernos el amor en todo el tiempo que duran las estrellas.

Y verás, tengo en mi mano un papel con esa palabra, escrita en rojo, en mayúscula, y al lado de ella, entre paréntesis pone nuestra, no se que pareja se refiere ese posesivo pero yo voy a creer que es a la que un día, cuando todo el huracán pase, seremos tu y yo.

Lo duro del huracán es que siempre deja secuelas. 

Louis Broglie

Hoy he decidido cerrar los ojos y no ver el mundo. Qué más me daba. Por un momento, y como si no lo hubiera sentido antes, he tenido la sensación que todos los recuerdos que guardaba en una caja se habían esparcido por los suelos, pisado, mojados y no de nuestra lluvia.
Pues verás, he tenido ya dos veces tu número marcado en la pantalla de mi móvil pero cada vez que pienso en darle al verde las cuerdas vocales dejan de hablar y mi cabeza se queda en blanco. No puedo. Aun sabiendo que me lo cojeras y quizás me dirás que he tardado un poco menos de lo que esperabas. Pero no puedo.
Entonces pienso en cuando tu viniste a por mi, cuantas veces lo habrás echo ya.. Venias con el contador a 0, temiendo mi respuesta, pero viniste. Y luego estoy yo, aquí, sentada por las noches en mi cama intentando olvidar tu número para así no poderlo marcar más, pero como quieres que olvide lo único que me puede unir a ti..
Siento que esta vez ya es tarde, que ya han habido suficientes oportunidades para ambos. Que nos perdimos, aunque yo lo hiciera un poquito más al final, pero así fue. Y creo que es verdad eso que dicen que muchas veces no se deja algo por miedo a quien lo quiera coger. Seré egoísta. No me importaría para nada aislarte del mundo, raptarte en mi pequeña burbuja a la que yo llamo habitación, alimentarte de mis caricias y regalarte mis labios como postre.
Pero, se que nada de esto pasará pues no tengo agallas para darle al verde..

Regret

Si algo he aprendido en estos últimos días es que Aristóteles se equivocó al formular su gran teoría sobre el mundo celeste y el terrestre.  Bueno, mirándolo bien, puede que mintiera y que dijera que el universo se dividía en dos para no revelar que la mejor constelación se encontraba entre tu ingle y mi lengua. Sí, de echo, estoy totalmente segura de que Aristóteles mintió. Yo también lo hubiera echo si hubiera podido, que pude. Te hubiera escondido de todos los ojos que intentaban curiosear por debajo tu camisa, te hubiera arrancado el alma solo si así supiera que ibas a ser mio para siempre. Pero verás, creo que lo que no sabe ningún filósofo, ni matemático, ni físico.. Es que la mejor de las fórmulas se encuentra enterrada ahí, debajo de tus parpados. Que daría yo por ver que esconden esas perfecciones que decidieron mirarme un día con el sol de su parte.. Que daría yo por parar el tiempo de tu vida y adelantar el mío, o por levantarme con tu brazo por debajo de mi nuca.
Creo que tiene razón ese que dijo una vez, si alguien lo dijo, que no hay mayor vicio que ese del cual no te quieres salvar. Y me he dado cuenta que soy una suicida de tus letras, que me gusta arañarme sólo para que luego vengas a sanarme con tu saliva. Creo que me vuelto adicta a esto de echarte de menos, a sufrir como una niña; creo que se que no llego a alcanzarte y que por eso, me quedo aquí, con tu recuerdo hablando un rato sobre por que me escondiste a mi también el último lunar de tu pierna y dejaste que tus labios fueran mi vía fácil, ya que no había manera de hacerlo todo tan fácil como pasándonos los sentimientos que callábamos de boca en boca. (sí, tu quizás no te acuerdas pero la primera vez que me leíste me dijiste: "me ha gustado esa frase". Me da igual si lo dijiste para enamorarme, pero mira, aquí la tienes, para ti)

Ps. Me gustaría escribirte un ps pero no sé, creo que es hora que deje de escribir..

El dice que no, pero para mi si es discutir.

- Mire el problema es que nos queremos demasiado para estar separados, sin embargo, una vez estamos juntos somos bombas nucleares dispuestas a erradicar cualquier ápice de vida a nuestro alrededor. Digamos que eso no sería demasiado malo si no fuera por que muchas veces acabamos con heridas de guerra demasiado profundas, sabe de las que le hablo verdad? Esas que no sanan con lo sientos. Pero verá, necesito que me ayude de alguna manera por que estamos dentro de un bucle que, por lo menos por mi parte, es muy difícil salir. Que si le quiero? Madre mía si le quiero.. El problema, y no se si lo es, es que con el paso de 0 a 100 en 0, y no, eso debe terminar y la de veces que nos hemos propuesto terminarlo, pero míreme, siempre termino igual, bueno, terminamos. Yo me voy, puesto que el nunca tiene fuerzas para rendirse. Luego uno de los dos empieza a necesitar el contacto del otro como si fuera la única gota de agua potable en este mar, y de vuelta a la primera página. 

Así que no se que narices debo hacer con ese hombre, de verdad, me he dado por vencidas todas y cada una de las veces que he vuelto a por sus labios. Y no es que el no tenga remedio o que sea el típico detallista que te hace enfadar demasiado para luego pedirte perdón a besos; no es que yo viva demasiado en mis sueños y me cueste demasiado eso de volver a la realidad para darme de bruces. Vera, el problema es que a mi me faltan  un par de cojones y a el un poco más de tacto. 

+ Señorita, más vale que empiecen a aclararse si no, pasara enero, febrero, marzo y abril y justo cuando uno de los dos decida volver donde lo dejo el otro ya se habrá ido.

Mi luna blanca, te pienso en cada instante.

Habías escogido todo lujo de detalles para despedirte. Me habías roto en diez mil pedazos dejándome sin hilo para coserme. Tu canción sonaba a todas horas, a cada instante, y yo, no podía dejar de resquebrajarme con cada vocablo que escuchaba de tu voz.
Eras minucioso en todo lo que hacías, sabias como llegar a mi, como si me conocieras des de siempre y no des de ese 13. Y me dejaste sola con esa canción, que aun sin ser tuya ya lloraba con ella, pero ahora, que era nuestra, se había ganado, sin demasiado esfuerzo, un perfecto hueco en mi memoria. Cada vez que la escuchaba sentía como se enlazaban mis cuerdas vocales, formando así un silencio de lágrimas que sólo lloraban palabras. Palabras que no te dije, que si te dije, que jamás te diré..
Y recuerdo cuando a veces me quedaba muda mirando tus ojos, pero sobre todo tus labios, y de mi no salía más que un largo silencio seguido de sonrisas. Pero lo que tu no sabes, es que cuando yo callaba, pensaba en como describir la perfección que mis pupilas reflejaban. Pero verás, siempre optaba por callar, si no, dime tu qué palabras hubieran podido explicar aquello que no cave en el alma.
Y te ibas, ahora ya sabía que te ibas.. Habías utilizado esa palabras que yo acostumbraba a decir, "última", y que mal sonaba en tu boca que siempre rebozaba esperanza.
Te prometo que seré feliz. Seré feliz cuando te piense, cuando te sueñe, cuando no quiera olvidarte, cuando te lloré, cuando te ame aunque tu ya no lo hagas; seré feliz, lo prometo.

Ps. Soy incapaz de escribirte la última carta, pero cuando lo haga, la guardaré en esa caja de madera que un día alguien me dio. Siento haberle apagado la luz que tenían los ojos que me la entregaron. Prometo devolvérsela algún día, para que vea, que yo, no dejé de pensar en la luna si un solo momento.

Párrafos diferentes para gente diferente.

Podría hablaros del dolor con cientos de metáforas y del amor, con tan solo un nombre aunque ahora mismo ya no pueda pronunciarlo. Pero me gustan los pómulos marcados, los ojos rasgados y grande, con pestañas finas que tras teclearlas inunden los oídos con mares de melodías. Me gustan las espaldas amplias para poder dibujar caminos largos, llenos de curvas que rodeen pecas, llenos de sonrisas que rodeen paletas.
A mi lo que más me gusta es ir saltando de diente en diente hasta caerme por tu campanilla y probar ese sabor tan dulce que me dejabas en los labios al besarme, y como besabas.
Pero verás, si te digo algo que quede entre nosotros o entre los pequeños centímetros cúbicos de tu piel que un poseí; pero prométeme que será nuestro secreto a voces, ¿lo juras? (eco)
Contigo no me haría falta una espalda ancha, me bastaría con verte sonreír, una vez, para saber que mi camino está entre tus dedos.




Pd. No me gusta que alguien crea que todo lo que escribo lleva un sólo nombre que es el suyo. Gracias. 

Lo entiendes ahora?

Veras mi amor, mientras tengo enfrente de mi un montón de hojas con apuntes, yo sólo pienso en que hacer con todos los recuerdos que guardo de ti, de nosotros; puesto que soy incapaz de olvidarlos o de proponerme hacerlo.
La verdad es que hay veces que pienso que no te quiero, ¿más que persona haría sufrir a quien  late por ella? De todas maneras he decidido no amargarme, se que lo que tuvimos fue real y no uno de mis sueños que se interrumpe con el amargo sonido del despertador, que por cierto, no es tu mirada y eso me quema.
Veras mi amor, yo me fío de ti como lo harían los impulsos del corazón. Lo he pensado miles de veces con miles de labios distintos y siempre llego al mismo punto de cobardía o de sentido común, llámalo como quieras, pues yo ya no se ni lo que soy. Prométeme, aunque sea lo último que hagas en la distancia, que todo lo que hagas será por que lo sientes. Que si te vas, como si yo no me hubiera ido antes, lo hagas por que hay otros ojos que son capaces de recitarte esa particular melodía que yo solía tararear en tu oído o que es incluso mejor, quien sabe..  Dime que si te vas me lo dirás, no se como, ni si lo harás nariz frente a nariz o por uno de tus mensajes, que aun que tu no lo sepas, me crean océanos de sentimientos apunto de estallar la tempestad. Pero dímelo. Susúrrame en silencio que ya no eres mío, o que lo dejaste de ser el día que cogí todas las gotas de sudor de tu almohada y me las llevé conmigo dentro de un pequeño frasco.
Veras mi vida, si es que aun eres mía y no has encontrado la tuya. De lo único que tengo miedo es de que llegue el día en que me plantee que hubiera pasado si ayer hubiera escogido quedarme entre tu pelo y no volar más allá de donde están las nubes sola. Te prometo que es de lo único que tengo miedo, de perderte, aunque ya no estés conmigo; de no besarte, aunque hayas bailado ya el mismo tango con mil lenguas; de perder la magia con la que un día conseguí enamorarte.. Y lo que más me pregunto, ya no es si me lees o si me echas de menos, eso ya no importa, tu tienes algo mío, algo que se va a quedar allí, a tu lado, siempre, me eches o no de menos, me quieras o no; tienes un capítulo de tu historia a mi lado que jamás podrás borrar. Lo que me pregunto es que debo hacer el día que me cruce de nuevo por tu calle y me digas que esta vez es tarde, que le quieres como a nadie y como a todo. Yo me pregunto mi amor, y ya me da igual si no puedo llamarte así, lo haré las veces que quiera y lo alto que me permita este pequeño hilo de voz; si cuando me claves esas palabras en el abdomen debo decirte que sólo vengo a por el café que te debo o a joderte la vida que llevas ahora.

Ps. Supongo que si tu eres feliz yo lo seré más, esto no quiere decir que cuando tu sea feliz yo venga a destrozarte la vida para luego coserla poco a poco entre besos por la espalda y la clavícula. Entiendes ahora por que digo que te voy a destruir?

El próxima día prometo no despertarme si vuelvo a soñar contigo.

Mañana cuando me levante quiero mirarte y decirte que esta noche he dormido con el frío en los huesos porque tu te has quedado toda la sábana, esa que antes habíamos empapado. Iba a robarte un cachito de ella pero dormías tan plácidamente que he sido incapaz de despertarte, no vaya a ser que me estuvieras soñando y te despertaras con mis besos.


Ps. Siento no escribirte, estoy de exámenes y llevo muchísimo estrés, bueno, ya me conoces, me ahogo con un sorbo de agua.
Ps2. A lo tonto como pasa el tiempo, y cuanto más lejos, más cerca de mi estás.

Te lo digo en serio, mi amor.

Creo que estabas loco, yo también  pero tu, siempre estabas un poco menos cuerdo que yo.  ¿Que por que lo digo? Pues verás, no conocí a nadie, puesto que sólo te conocía a ti, que fuera capaz de amar aun sabiendo que aquí, donde estoy yo, la cabeza andaba por lo bordes de la razón.
No se como eres capaz de intentar quererme, o de quererme ya. ¿No te das cuenta que te destruyo? Supongo que, aunque no lo supiera, siempre fui así. Capaz de enamorarme perdidamente de los huesos de otra persona para luego romperlos. Y me asombra que seas tan masoca, tanto como lo soy yo.Y que decidas esperarme, quizás no eternamente, pero si lo que duren tus sonrisas en este escenario. Y es que verás, creo que volveré, se que volveré, no puedo ser tan cobarde para no hacerlo. Pero no se cuando, ni como, ni que motivo me hará que aparezca sin más. No se si me dirás que ya es tarde o que alguien ya se ha  adueñado de tus ojos, da igual, no importa. Si tu quieres puedo luchar contra cualquier obstáculo que no sea yo misma, como lo soy ahora.
Te lo digo en serio, mi amor, no tengo miedo a más labios (no es egocentrismo, es amor), pero creo que no habrá nadie en tu cama, nadie que no puedas cambiar con las sábanas.

Y no dudaría en mojarme un poco más si mi cuerpo pudiera absorberte todo.

Si vieras el día que hace aquí vendrías a besarme bajo la lluvia, por que llueve a cántaros, a recuerdos..
Parece que el cielo ha escogido el color de tus pupilas, pues este es igual de fondo que ellas. No se vislumbra el sol, ni tu sonrisa pero imagino que cada gota son tu caricias y termino empapada. Calada hasta las vertebras, pero calada de ti.
La gente lleva paraguas mientras yo piso los charcos para dejar huellas por si vienes a buscarme y no me encuentras, por si me he escondida bajo tus caderas o entre tu camisa y tu calor. Por si decides buscar mi sonrisa  detrás de este rastro de agua, de momentos..
Yo sólo espero que caiga la misma lluvia en Barcelona y que poco a poco te acuerdes de mi, o decidas olvidarme, pero que pienses un momento en nuestra historia, como yo lo he echo con la excusa de recordar el día que cumplí mi sueño bajo este cielo, gris, de tormenta. Junto a ti.

Todo lo que soy es lo que ahora ves, tu prefieres lo que pueda ser..

Su nivel de fuerza ha sido agotado..

Dame a menos aun que sea un puto motivo para odiarte y no dolerme tanto. Que ya no puedo mi amor, ya no puedo. Si supieras lo que siento me dirías que soy tonta por haberlo así escogido pero créeme  ya no tengo alma.. 

Te has llevado mi corazón aunque no lo sepas, ya no puede latir, ya no vivo en esta vida. Ya no puedo más.. Los recuerdos que no olvido son los que más me ahogan, siento tus brazos cada noche, tus labios en mi frente y siento como cada vez me quitas un poco más de vida.

No pretendo que esto tenga coherencia, adecuación ni cohesión, como iba a tenerlo si ni si quiera lo tengo yo. Me siento tan perdida..

Ya no encuentro el rumbo de tu espalda.. 

Ojalá pudieras creerme cuando te digo que para mi no es fácil, que irme sin tus besos fue lo más duro de ese sábado. Ojalá pudiera guardar todo lo que siento en una caja de madera y enviártela . Ojalá, ojalá te pudiera querer menos y mejor.. 

Lo siento, pero yo ya no puedo dejar de derramar cascadas repletas de momentos.. A mi me faltan fuerzas y cojones, lose. 

No, aquí no!

Aun no he borrado las últimas fotos de mi móvil, esas en las que salimos sonriendo, juntos, besándonos. No he podido. He borrado tus mensajes, salvo el último que lo he guardado como si fuera una reliquia buscada por mucha gente, y aun que no sea así, para mi, lo es. He borrado tu número de la agenda, ojalá fuera igual de fácil de mi cabeza.. He borrado y he intentado olvidar, sabiendo que así, si lo conseguía dolería menos, todos los recuerdos que me dabas. ¿Pero que quieres que olvide si estás en todas partes? Es mirarme al espejo y verme despedaza, encontrarte en los bolsillos en forma de billetes de tren. Abrir una caja y ver tus letras, abrir otra y ver los sueños.
No se como lo haces, pero a veces creo que sería capaz de amarte toda la vida. Como una película, en concreto la de Noa. Ya sabes que a mi me vuelven loca ese tipo de películas donde todo termina tan mal y de repente, tras un instante de "noseque" se vuelve a amar desde 0, como si nada. Pues como te decía, creo y no me da miedo asegurarte que se de sobras que te querré siempre, pase lo que pase. Te querré en febrero, en abril y en setiembre. Cuando llueva o debas buscar refugio bajo algún árbol por el calor. No se si me explico, el caso es,  que yo no voy a dejar de latir por ti. Y quizás tarde años, incluso una vida y una eternidad (la última te la reservo) pero esto no ha terminado aquí, lo juro.
Eso sí, no puedo decirte si va ser en semanas, en meses... No se si volveré cuando tu ya no me quieras, no lo se, no te pido que me esperes, aunque luego me clave mis palabras en el torso. No se si será mañana, a finales de enero o a principio de agosto, no lose. Solo haz lo que debas, lo que te marque el día a día, incluso enamórate, pero prométeme que será como prometimos y que si de repente un día aparezco con un "¿Te apetece un café?" recordarás esto y no te quedará otra que aceptar..

..

Dicen que se puede morir de 1000 maneras distintas y yo, solo te conozco a ti.

Como explicarte que en mi pañuelo ocre, ese que llevaba cuando te saludé por última vez, se han quedado atrapadas tus lágrimas que pedían nada más simple, que amor.. Como explicarte que tus lágrimas son mi antología oceánica preferida, que navegaría por ellas en busca de tu sonrisa como tu un día hiciste. Como explicarte que me duele el alma y todos los rincones de mi decisión cuando pienso en tus labios, en tu mirada reflejada en otras pupilas que no sean azules, en tus manos dibujando caminos por otra espalda.. Como explicarte que se me desanudan los nudos que creía haber atado con toda firmeza cuando pienso. Ya que solo pienso en ti.

Te dejo escoger, me dijo y que raro sonó por primera vez.

Esta vez me puse a prueba a mi y descubrí que tus palabras, tranquilas, serenas, sin nada más que verdad, me hicieron mirar hacía arriba y parpadear, rápidamente  como siempre hacía para que no me cayeran silencios por las pupilas. 
Así no me ayudas, que te quede claro. Así solo haces que sucumbirme en esta espiral nublada de sensaciones que tu me das.
Y sabes lo peor de todo, que tras verme así me abrazaste y me dijiste que no tenías prisa. Entonces dime tu, que entiendes cuando te hablo sin palabras, por que llegaste ahora y no antes?

Deja de torturarte, lo que tuvimos fue real. Tu felicidad depende de ti, jamás de nadie más.

¿Sabes esos momentos en los que dejas el móvil a un lado de la mesa y hasta pasada medio hora no lo miras? ¿Sabes que momento te digo? Sí hombre, justo el momento en el que recibo tu mensaje y se me rompen las costuras que he creado para sanar cualquier herida.
De repente, te leo, como si nunca antes lo hubiera echo y tus palabras me sorprendieran por primera vez. Usas el tren, los pasajeros que suben y bajan como yo un día dije, y créeme, siento que para ti, aunque no quieras verlo, soy una daga en movimiento sobre tu piel, sobre tu pecho.
Tus letras hablan de recuerdos, de palabras, de promesas que como siempre dije y no cumplí (perdón por mencionarlas, perdón por prometerlas) tengo la maldita costumbre de prometer cuando algo me hace feliz. Tus palabras hablan del pasado y se bien que desearías que narraran el presente, incluso el futuro, solouno para dos caminos, pero sabes que yo esta vez no puedo..
La verdad es que me sorprendes, llegué a pensar que tu tren se había quedado sin fuelle, y la verdad, no me hubiera extrañado, yo tampoco te daba motivos para que siguieras por las vías que llevan hacía mi. Pero de repente, cuando tienes el móvil a un lado de la mesa y pasas media hora sin mirarlo aparece tu mensaje dejándome sin palabras, doliéndome porque se que te hago daño, sintiéndome una perfecta droga que tras consumirla, mata levemente. Y lo siento, y siento más tener que escribirlo, por que no soy capaz de mirarte y decírtelo mientras tus ojos escurren palabras rotas, siempre mis palabras, recuerdos, sentimientos... Yo, aun siendo hielo, me derrito, y no puedo ver como tu lo haces, las lágrimas siempre, siempre, me han superado.

La verdad es que no se ni como terminar esto.. No se como decirte que dejes de llegar a mi estación, mis paginas siempre llevan al final, no avanzo y lo que tengo claro es que no te anclaré conmigo. Gracias por todo, es que no tengo otra palabra que decirte, gracias crosa, gracias.

Pd. No te hagas más daño, prometemelo.

Tus palabras son cordones que se atan a la muñeca.

No conozco la calma des de que estoy a tu lado. No paso un día sin que tengamos que discutir, siento de nuevo todo eso por lo cogí mi sonrisa, mi equipaje y me fui.

Mis palabras se cruzan con las tuyas formando un perfecto ejercito de exclamaciones que tienen las puntas afiladas, dispuestas a magullar. Y que vas a saber tu de magulladuras si tienes el mejor escudo, si por más que intente rozarte, ya sea para amarte como para robarte tiras de piel, siento esa enorme barrera. Y yo lo siento, lo siento de verdad, pero no puedo serme infiel a mi para serle fiel a otra persona.  

Yo te quiero, amor.

Perdona si te llamo amor, cielo, pequeño granudullon, pet - ito, lechun... Perdona si no te llamo cariño y tu nombre se desliza por mi lengua. Perdóname pero estoy llorando tanto con tus recuerdos... No consigo empezar de nuevo algo, no puedo. Si supieras el dolor que siento al intentar olvidarte... El peor de los terremotos inundando mis costados, un huracán destrozándome las costillas, las vertebras... ¿Y por que no me desgarras el corazón?
No consigo no retenerte dentro de mi, no puedo, a veces empiezo a pensar que en todo este tiempo, nunca me propuse dejar de amarte, y sí, se lo que digo y cuanta importancia tienen todas y cada una de mis palabras, por eso escribo, por eso te escribo a ti, mi amor..
Cada vez que me despido de ti con una sonrisa, con un beso (o tus besos, como odio esa perfecta nicotina), con un abrazo me vuelvo tan pequeña...
Vete de mi lado, te lo pido como lo que soy para ti, lo que  nunca dejaré de ser, lo que jamás dejarás de ser en mi. Vete, vete y déjame, te lo exijo. Vete por que a mi me esclaviza no tener fuerza para amarte pero si para echarte de menos, vete por que estoy ahogándome en un mar del que no voy a salir contigo. Te pido que te vayas por que yo no puedo irme otra vez, ver como se te escapan las promesas por las pupilas. Te pido que te marches, que me ayudes a quererte y a quererme a mi también, por que siento como te necesito tan cerca y a la vez tan lejos..
Quiero enamorarte pero cuando todo sea más fácil. Cuando un día me esconda en tus sábanas para no volver a salir de ellas, cuando tu calle sea la mía, cuando pueda amarte con todo mi corazón. Por que no se tu mi amor, pero yo estoy tan perdida como el último botón de tu camisa, y no puedo más. No puedo contigo, no puedo sin ti. Así que te pido que me abraces como nunca, como si quisieras que la ropa se confundiera con tu cuerpo. Abrázame, bésame y dime que te vas para que yo pueda aparecer entre tus cortinas con un "te necesito, siempre lo he echo, perdón por ser cobarde, perdón.."
Vete y deja que te necesite después de tanto llorar.
Pero dame el último beso y deja que se me quiebren todos los huesos al darte la vuelta.

Yo de ti me diría adiós.

Quizás empieces ahora a entender mi cordura dentro de toda mi locura, mis idas y venidas y estas letras mal cosidas. Quizás soy menos clara que el deslumbrar del sol en tus ojos pero, siéndote sincera, no me importa.  La verdad, es que hoy siento que llevo como equipaje una barrera impenetrable de sensaciones, de "no's", de "vete tu de mi que yo no puedo irme". Y si algo se seguro, a parte de que tu nombre se acentúa tantas veces como se estremece mi corazón, es de que deberías mandarme lejos, lejos de ti, porque lo único que seré capaz de darte, a más de besos infinitos bajo cualquier cielo, es dolor, dudas y un poco de polvo de hadas.

1 para 1.

Mi vida estaba colgando de recuerdos medio rotos, de cicatrices que yo sabía como debían sanar. Tenía mi remedio a dos minutos de mi calle, a dos sonrisas, pero mi historia era de esas en que la última página te lleva de nuevo a la primera. 

No tenía fuerzas para seguir con este juego en el que todos participábamos. No quería ser la razón de nadie, por que si lo era, alguien, siempre había alguien, que se derrumbaría en mil pedazos frente mis palabras.

Así que me prometí empezar a enamorarme de la realidad, de jugar a apostar sonrisas, de quien? De quien me pidiera el corazón. Así que me prometí empezar a destruir para avanzar.

23.59

Si pudiera escribir, aquí, en tu espalda o en todos los pliegues de tu sonrisa lo que había deseado para este año, nuestro año, te quedarías con los labios tatuados de promesas y recuerdos, de frío, de miedo.
Si retrocediera, tan solo un día atrás, no hubiera dudado en decirte que vinieras, que cambiaras todos tus planes, que yo haría lo mismo, que lo haría por ti. 
Pero un loco borracho, borracho de amor, me dijo que no aprovechaba los segundos de mi vida, que tras contarlos los iba tachando poco a poco, desmereciendo así,  las oportunidades que estos me daban. Yo, y tu, y todo lo que somo yo y tu, eramos conscientes de que tenía razón. Que borracho miente bajo la luz de esa luna, un poco menos llena, por habérnosla comido a besos, a pequeños y largos besos, hacía tan solo un camino con muchos arboles y poca luz y piedras y cajas.
Como explicarte que si fueran las 23 y 59 del día anterior, del año anterior, te hubiera besado haciendo una calcamonia de tus labios sobre mi piel, como muestra de una eternidad eterna. De un miedo demasiado grande que ya no podía detener.